Y fue así como terminó todo.
La última pincelada a un cuadro que apenas era un boceto, pero podría haber llegado a ser una obra de arte. Estas cosas siempre son complicadas, la vida es complicada.
Quejarse pocas veces ha servido de algo, pero tampoco la resignación es mi fuerte; así que supongo que volveré a encontrarme con una vieja conocida que acude a mi en los momentos necesarios, la improvisación.
El futuro incierto siempre me resultó atractivo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario